Maniobras navales de alto riesgo: barcos remolcadores destacan como alternativas para aumentar la seguridad

Las embarcaciones escoltas juegan un rol clave para prevenir accidentes originados por condiciones irregulares de las aguas, imprevistos mecánicos o problemas de navegación, entre otros. Además, resultan muy convenientes como herramientas preventivas en lanzamientos de barcos o asistencias tanto al llegar como al salir de los puertos.

 Abril, 2024-. La exigencia de más medidas de seguridad para las operaciones navales, y en todos los rubros productivos, se está convirtiendo en una tendencia a nivel mundial. Esto cobró todavía más relevancia luego de la tragedia naval de Baltimore, en la que un buque de transporte de carga derribó el principal puente de la ciudad tras chocar con él.

De hecho, no es la primera vez que un accidente nos recuerda la importancia del uso de remolcadores. En 1989, después del accidente de Exxon Valdez en Prince Willian Sound en Alaska, que culminó con el derrame de 38.800 toneladas de crudo al océano, se implementó la Ley de Contaminación por Petróleo de 1990, que exige remolcadores escoltas para los buques cisterna. Ley a la que también implementaron los estados de Washington y California en poco tiempo.

Y si bien, esa situación calificaba como una operación de alto riesgo, hay varias más que, al desarrollarse en un ambiente fluvial o naval también adquieren esa categoría, requiriendo así de más opciones para aumentar la seguridad.

En ese sentido, entre las alternativas más eficientes para responder a esos requerimientos destacan las naves remolcadoras o escoltas: embarcaciones que acompañan a otras ayudan a mejorar la navegación de un barco, previenen accidentes y disminuyen los riesgos de maniobras compleja.

En la actualidad, Chile cuenta con una gran capacidad ingenieril y logística para fabricar este tipo de naves. De hecho, varios de los remolcadores construidos en Valdivia, en específico, en dependencias de ASENAV, hoy están mejorando los estándares de seguridad en distintos países del mundo.

Desde la compañía, enfatizan el rol clave que juegan los remolcadores, sobre todo para operaciones que se desarrollan en un país tan particular como el nuestro. En ese sentido, Germán Schacht, Gerente comercial de ASENAV afirma que “en Chile somos un país con 56 puertos, 10 estatales y 46 privados. Tenemos, además, una extensa costa de más de 6 mil kilómetros que nos hace depender del transporte marítimo y fluvial: un área donde tenemos el deber de preocuparnos por la seguridad”.

El vocero de ASENAV también destaca el rol de las naves escoltas pues “resultan una excelente alternativa para disminuir riesgos, por ejemplo, las salidas y llegadas a los puertos por zonas de navegación complejas; para ejecutar maniobras de alta complejidad; o para ayudar a mover naves con alguna falla mecánica, desperfecto o maniobras de salvataje”.

Sus palabras adquieren todavía más relevancia si se consideran complejas operaciones que, por no contar con herramientas adecuadas, terminan generando cuantiosos daños. Uno de ellos es lo ocurrido en 2021 en Egipto. Este país, el Mar Mediterráneo se une con el Golfo de Suez a través de una delgada línea, marcada por la ruta fluvial denominada como Canal de Suez. En marzo de ese año, uno de los barcos de transporte de contenedores más grandes del mundo tuvo que operar con un fuerte viento que desestabilizaba a la nave. Eso, combinado con malas indicaciones dadas al piloto, derivó en un atasco del buque, que terminó bloqueando la ruta en todas las direcciones por una semana. El hecho provocó multimillonarias pérdidas, pues cortó una de las vías navales más importantes para el comercio egipcio.

Otro hecho complejo fue el que ocurrió en España en agosto de 2023, específicamente en Ibiza, donde un buque con 750 pasajeros terminó chocando con el muelle al que se dirigía, producto del mal tiempo. En este caso, varias personas terminaron heridas y otras decidieron no continuar con la ruta, a causa del miedo que les provocó volver a embarcarse en esta nave.

A causa de esto, el vocero de ASENAV sostiene que “puertos de gran importancia para el mundo, como el de Vancouver; los que se ubican en el Canal de Panamá; el puerto de Malmö en Suecia o el puerto de Qingdao en China, están tomando precauciones con una fuerte inversión en remolcadores”.

Por lo mismo, Schacht también realiza un emplazamiento para poner el foco en la prevención. “La invitación que hacemos desde Asenav es a usar todas las herramientas que tenemos disponibles, como los remolcadores escort, para asegurar una correcta salida de los barcos hasta zona segura y no lamentar accidentes en el futuro”.

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email
WhatsApp

ASENAV es un astillero líder en la costa Pacífico de América que se dedica a la construcción de naves con alto nivel de ingeniería, destacándose por su calidad de construcción, versatilidad y entrega a tiempo. El astillero ha entregado satisfactoriamente más de 190 buques en casi 50 años de historia, tanto a armadores nacionales como extranjeros, pertenecientes a los mercados de acuicultura, ferry, soporte de plataformas de altamar, naves de turismo expedición, pesca y remolcadores, entre otros. ASENAV se destaca por la constante innovación de sus diseños y construcciones, siendo pioneros a nivel local en la utilización de diseños de vanguardia en distintos tipos de naves. En la actualidad, el astillero continúa aplicando tecnologías de última generación, como naves con sistemas de propulsión diésel-eléctrico e híbridos, posicionamiento dinámico, reducción de emisiones de gases, entre otros. La visión de la compañía es contribuir a la industria del transporte marítimo entregando a sus clientes soluciones sustentables que incluyan tecnología de vanguardia para la disminución del impacto ambiental, una mejor eficiencia en su operación.

Últimos artículos
Síguenos

2024 © ASENAV | Diseño web por Rocket Media